¿Estuve enfermo? ¿He sanado? ¿Y quién mi médico ha sido? ¡Ah!, Si todo lo he olvidado, mi médico fue el olvido.
Pronto lo olvidarás todo, pronto serás olvidado.
El olvido de la felicidad es lo único que representa en el mundo la felicidad verdadera.
Se ama sin razón y se olvida sin motivo.
Olvido es señal de menosprecio, y por tanto causa enojo.
Nada graba tan fijamente alguna cosa a nuestra memoria como el deseo de olvidarla.
Procuremos olvidar lo que traído a la memoria nos entristece.
Lo que está olvidado no se lamenta.
Querer olvidar a una persona es amarla más. No hay nada más bello que acordarse del que olvida.
Si no puedes llegar a la generosidad del perdón, refúgiate en el olvido.
Fuera feliz el hombre si, como está en su mano el acordarse, estuviera también el olvidarse.
El olvido es el verdadero sudario de los muertos.
Nunca se perdona bastante, pero se olvida demasiado.
Lo que está fuera de tu vista, pronto estará fuera de tu entendimiento.
Si nos sumimos en el placer o en Dios, tratamos de beber el olvido de nosotros mismos.
Nada graba tan fijamente algunas cosas a nuestra memoria.
El olvido llega al corazón como a los ojos el sueño.
Un instante y habrás olvidado todo; otro instante todavía y todos te habrán olvidado.
Un inmenso río de olvido nos arrastra hasta un abismo sin nombre.