No puedo decir quiénes me irritan más: si los que quieren que no sepamos nada o los que ni siquiera nos dejan ignorar.
La oscuridad nos envuelve a todos, pero mientras el sabio tropieza con alguna pared, el ignorante permanece tranquilo en el centro de la estancia.
Mientras triunfe la ignorancia y trocadas las ideas, la libertad de hacer mal, llamada libertad sea.