El programa de la vida feliz apenas ha variado a lo largo de la vida humana.
No eres ambicioso: te contentas con ser feliz.
He cometido el peor de los pecados que un hombre puede cometer. No he sido feliz.
Hay una especie de vergüenza de ser feliz a la vista de ciertas miserias.
Muchas personas se pierden las pequeñas alegrías mientras aguardan la gran felicidad.
Lo esencial para ser feliz es mantener siempre bien colmado el corazón, incluso de dolor. Sí, incluso de dolor, y aun del dolor más amargo.
Sólo puede ser feliz siempre el que sepa ser feliz con todo.
La verdadera felicidad cuesta poco; si es cara, no es de buena especie.
La felicidades no existe. Lo único que existe es el deseo de ser feliz.
Pensad que hasta para ser dichoso hay que acostumbrarse.
La felicidad consiste en tener buena salud y mala memoria.
La felicidad doméstica es el fin de todos nuestros anhelos, y la recompensa general de todos nuestros trabajos.
Los que nunca fueron desgraciados no son dignos de su felicidad.
El bien de la humanidad debe consistir en que cada uno goce al máximo de la felicidad que pueda, sin disminuir la felicidad de los demás.
Si yo no puedo ser feliz, quiero consagrar toda mi vida a la felicidad de mis semejantes.
El hombre feliz es más raro que un cuervo blanco.
La felicidad no es nunca grandiosa.
Muchos buscan la felicidad como otros buscan el sombrero: lo llevan encima y no se dan cuenta.
La felicidad no se experimenta... se recuerda.
Podría hacerse a mucha gente feliz, con toda la felicidad que se pierde en este mundo.
