El hombre ha nacido libre y por doquiera se encuentra sujeto con cadenas.
La igualdad en la riqueza debe consistir en que ningún ciudadano sea tan opulento que pueda comprar a otro, ninguno tan pobre que se va precisado a venderse
Es verdaderamente libre aquel que desea solamente lo que es capaz de realizar y que hace lo que le agrada.
Existe un libro que constituye, a mi juicio, el más feliz tratado de educación natural... ¿Cuál es ese maravilloso libro? ¿Aristóteles? ¿Plinio? ¿Buffon? No; es Robinson Crusoe.
Toda mujer literata se quedará soltera en tanto haya hombres sensatos sobre la Tierra.
La naturaleza no nos engaña jamás; somos nosotros quienes engañamos.
La única costumbre que hay que enseñar a los niños es que no se sometan a ninguna.
Trabajar es un deber indispensable para el hombre social. Rico o pobre, fuerte o débil, todo ciudadano ocioso es un bribón.
El ocio me basta y, con tal de no hacer nada, me gusta más soñar despierto que dormido.
Todas las pasiones son buenas cuando uno es dueño de ellas, y todas son malas cuando nos esclavizan.
Estas dos palabras, patria y ciudadano, deben ser borradas de las lenguas modernas.
Lo que es malo en moral es malo en política.
Es muy fácil percibir lo imposible cuando no se trata de practicarlo uno mismo.
El presente es el único bien que el hombre en realidad posee.
La humanidad debe gran parte de sus desastres al primero que cercó un terreno y dijo: esto es mío. Los desastres se hubieran evitado si algún hombre hubiera gritado a sus semejantes: ¡No creáis a ese impostor; os perderéis si olvidáis que los frutos son de todos y la propiedad de nadie!
Creo en la religión todo lo que puedo comprender y respeto el resto sin rechazarlo.
Los remordimientos se adormecen en la prosperidad y se agudizan en los malos tiempos.
Los bienes del hombre no están en sus arcas, sino en el uso que de ellos se hace.
La igualdad en la riqueza debe consistir en que ningún ciudadano sea tan opulento que pueda comprar a otro y ninguno tan pobre que se vea necesitado de venderse.
El que se ruboriza ya es culpable; la verdadera inocencia no siente vergüenza por nada.
