El amor es un verdadero acceso de fiebre, con la diferencia que ésta comienza con frío y termina con ardor, mientras que el amor sigue el camino inverso.
El amor es la ocasión única de madurar, de tomar forma, de llegar a ser uno mismo un mundo, por el amor del ser amado.
El amor es una bellísima flor, pero hay que tener el coraje de ir a buscarla al borde de un precipicio.
La vida de las mujeres puede dividirse en tres épocas: en la primera, sueñan con el amor, en la segunda, lo practican, y en la tercera, lo echan de menos.