Aplasta en el disimulo las falsedades de los calumniadores, supera con la paciencia los agravios de los detractores.
A los que tienen paciencia, las pérdidas se les convierten en ganancias, los trabajos en merecimientos y las batallas en coronas.
En esta vida la paciencia ha de ser el pan de cadaporque nadie se nos hace tan pesado como nosotros mismos.
La esperanza y la paciencia son los dos cojines sobre los cuales podemos reclinarnos en la adversidad.
La paciencia que sonríe verdaderamente ante la aflicción, por lo general, se mantiene en pie, camina y aun corre; pero raramente permanece inmóvil.
Cree en el corazón de tu madre; los caminos tortuosos no conducen a nada bueno; la paciencia y la resignación deben ser nuestras principales virtudes.