El fanatismo es el efecto de una conciencia falsa, que sujeta la religión a los caprichos de la fantasía y al desconcierto de las pasiones.
La historia de las asambleas revolucionarias de todos los tiempos muestra que los fanáticos no han descubierto otro método de persuasión que la matanza sistemática de los adversarios.
¿Qué es más peligroso, el fanatismo o el ateísmo? Sin duda lo es mil veces el fanatismo, pues el ateísmo no inspira pasiones sanguinarias, mientras que el fanatismo sí. El ateísmo no se opone al crimen, pero el fanatismo es causa de que se cometan crímenes.
La fe separada de la ciencia fácilmente lleva al fanatismo; lo que salvará al mundo será la ciencia justificando la fe.
Yo soy partidario de la libertad de religión y estoy en contra de todas las maniobras encaminadas a lograr el predominio legal de una secta sobre otra.
Sabemos los crímenes que ha cometido el fanatismo en la religión. Cuidemos de no introducir el fanatismo en la filosofía.