Si los males no tienen fuerza para acabar con la vida, no la han de tener para acabar con la paciencia.
La poesía es una bellísima doncella, casta, honesta, discreta, aguda, retirada, que se contiene en los límites dela discreción más alta.
La excelencia de la poesía es tan limpia como el agua clara, que a todo lo no limpio aprovecha; es como el sol que pasa por todas las cosas inmundas, sin que se le pegue nada.
Yo, que siempre me afano y me desvelo por parecer que tengo de poeta la gracia que no quiso darme el cielo.
... y muchas veces te he aconsejado que no seas tan pródigo de refranes, y que te vayas a la mano en decirlos.
Para alcanzar tan gran bien como es el cielo, todo cuanto hay en la tierra se ha de dejar, hasta los padres y los esposos.