Si hablas mal, se hablará de ti peor.
Si añades lo poco a lo poco y lo haces así con frecuencia, pronto llegará a ser mucho.
El hombre que difiere la acción, siempre estará luchando contra su propia desgracia.
El amor es el arquitecto del universo.
Desde el instante en que el hombre comete un crimen entra el castigo en su corazón.
El hombre es la compañía forzosa del hombre indolente.
Son buenas amas de casa en el mejor de los casos, pero su perversidad es la mayor desgracia para el hombre.
La ociosidad es deshonrosa.
La vergüenza ayuda a los hombres o los envilece.