Hay momentos en la vida cuyo solo recuerdo es suficiente para borrar años de sufrimiento.
El perfume del alma es la memoria.
¡Oh, memoria, enemiga mortal de mi descanso...!
Una memoria ejercitada es guía más valiosa que el genio y la sensibilidad.
La nación que se olvida de sus defensores, muy pronto será olvidada.
El verdadero arte de la memoria es el arte de la atención.
El que no este seguro de su memoria, debe abstenerse de mentir.