La vida de los héroes ha enriquecido la historia, y la historia ha embellecido las acciones de los héroes; por consiguiente, no se sabe quién debe más, si los que han escrito la historia o quienes les han dado tan noble materia.
Una muerte ejemplar, honra toda la vida.
La mayor parte de los héroes son como ciertos cuadros: para apreciarlos conviene verlos no muy de cerca.
¡Una hora llena de gloriosa vida vale una vida mísera y sin fama!
El culto a los héroes existe, ha existido y existirá siempre con carácter universal en el seno de la humanidad.
El héroe es para mí, el iluminado de la acción.
O se escribe con sangre nuestra gloria, o la borra al pasar cualquier brisa.
Un héroe es todo aquel que hace lo que puede.
El heroísmo puede salvar un pueblo en circunstancias difíciles, pero es la acumulación diaria de pequeñas virtudes la que determina su grandeza.
La Historia me ha enseñado que sólo aparecen los actos heroicos en las derrotas y en los desastres.
Si pudiéramos salir de nosotros mismos y gustar la desdicha del héroe, cuántos de nosotros volverían sin pena a su felicidad estrecha.
