El ejército entiende mejor la idea de la gloria que la idea de la libertad.
El peso de los ejércitos permanentes y de las pesadas contribuciones hacen la vida intolerable y el descontento se manifiesta en protesta y revolución.
La verdadera misión del ejército consiste, no en apoyar incondicionalmente a cualquier personaje que se declara amo de un pueblo cuando sea oprimido.