Una de las principales virtudes sociales consiste en tolerar en los demás lo que debemos prohibir en nosotros mismos.
...Soy partidario de la tolerancia, ese sagrado derecho natural, baluarte de la verdad y que es lo más importante de todo para el falible ser humano.
No existe cualidad humana más intolerable en la vida corriente, ni que se tolere menos, a la vez, que la intolerancia.