No sólo de pan vive el hombre. De vez en cuando también necesita un trago.
En invierno bebo y canto por la alegría de ver que la primavera se avecina. Llega la primavera y entonces vuelvo a beber por la alegría de verla por fin entre nosotros.
No es insaciable el estómago, como la mayoría opina, sino la falsa opinión acerca de su ilimitada voracidad.
Pirette, hermana del gastrónomo francés Brillat-Savarin, murió a los 99 años y 10 meses, sentada en la mesa. La fulminó una apoplejía cuando acababa de gritar a la camarera: «Y ahora, hija mía, me queda poco tiempo: tráeme por favor los postres».
La nutrición encierra en sí todos los elementos de la historia humana, desde los más serios hasta los más frívolos; y la presentación de un alimento con su aspecto, colores y aromas permite adivinar la manera de ser del pueblo que lo elaboró, a veces durante siglos, desde la receta original.
Hígado de ángel eres, Suavísima sustancia, peso puro del goce sacrosanto, esplendor de la cocina compacto es tu regalo, es intensa tu estética riqueza, tu forma, un continente diminuto, tu sabor toca el arpa del paladar, extiende tu sonido en los tímpanos del gusto, y desde la cabeza hasta los pies nos recorre una ola de delicia.