El hombre puede apartarse del deber; todo lo lleva a sentir la importancia de él. El deber va unido inevitablemente a nuestro ser; nos lo advierte la conciencia cuando apenas comenzamos a tener uso de razón.
Cumplid vuestro deber y dejad obrar a los dioses.
Quiero lo que debo; para mí el deber no existe; sólo el quiero.
Desnudo o no, hambriento o no, cansado o no, siempre se puede hacer algo cuando se sabe que no queda más remedio que hacerlo.
En muchos casos hacemos por vanidad o por miedo lo que no haríamos por deber.
Entre mi alma y mi deber no encuentro diferencia.
Casos hay en que cumplir con el deber es pecar.