El valor es el hijo de la prudencia, no de la temeridad.
La cobardía es el miedo consentido; el valor es el miedo dominado.
El valor es el arte de tener miedo sin que la gente lo advierta.
El valor es el resultado de un grandísimo miedo. En realidad, cuando tenemos un gran miedo de morir nos dejaríamos cortar valerosamente una pierna.
El perfecto valor consiste en hacer sin testigos lo que se sería capaz de hacer delante de todo el mundo.
Muchas veces se conoce mejor a los valerosos en las cosas pequeñas que en las grandes.
Que no hay forma contraria que no la venza el valor.