El alma es una terrible realidad; puede ser comprada, vendida y cambiada, puede uno envenenarla o hacerla perfecta.
La realidad y la miseria me oprimen y, sin embargo, sueño todavía.
El hombre acepta como lógico y razonable todo lo que conviene a su egoísmo, colocándolo por encima de la realidad.
Todo el arte estriba en aproximar la realidad al sueño.
La realidad no puede ser mirada sino desde el punto de vista que cada cual ocupa, fatalmente, en el universo.
La realidad me inventa. / Soy su leyenda. ¡Salve!
Hay un nivel de la vida que queda clausurado a la luz de la realidad, pero debajo hay límites.