Sé templado en el comer y beber, y por ninguna cosa te desordenarás estés con naturales o extranjeros. Tampoco serás melindroso, comerás de todas las viandas, tarde o temprano, bien o mal aderezado. Contentarte has con lo que te dieren.
En invierno bebo y canto por la alegría de ver que la primavera se avecina. Llega la primavera y entonces vuelvo a beber por la alegría de verla por fin entre nosotros.
No es insaciable el estómago, como la mayoría opina, sino la falsa opinión acerca de su ilimitada voracidad.