La prudencia es suponer que nadie tiene completamente razón ni nadie deja de tenerla por completo.
La ciencia aumenta nuestro poder en la medida en que reduce nuestra soberbia.
La conciencia moral propiamente dicha no tiene en cuenta autoridades que manden, ni elogios, ni vituperios, ni recompensas, ni castigos.
Lo prudente es suponer que nadie tiene completa razón, ni nadie deja de tenerla por completo.
La filosofía es la unificación del conocimiento.
El mejoramiento de una sociedad es imposible sin un mejoramiento de los individuos.
Nadie puede ser perfectamente libre si no son libres todos; nadie será perfectamente moral, si todos no son morales; nadie puede ser perfectamente feliz, si la felicidad no alcanza a todos.