Jamás estés sujeto a las horas: las horas son hechas para los hombres, y no el hombre para las horas.
Cuida los minutos, que las horas ya cuidarán de sí mismas.
Pierde una hora por la mañana y la estarás buscando todo el día.
Por muy lentamente que te parezca que pasan las horas, las encontraras cortas si reflexionas en que nunca han de volver a pasar.
Ligeras horas del ligero tiempo, para mí, perezosas y cansadas.
Las horas son largas y la vida es corta.
Las horas que limitando están los días que royendo están los años.