Es más fácil juzgar el ingenio de un hombre por sus preguntas que por sus repuestas.
Hay tres cosas que es indiscreto manifestar: el ingenio en presencia de todos, la riqueza delante de los pobres y la alegría frente a los que lloran.
El ingenio es un don celestial bien inútil; lo que hace falta es razón, buen sentido, cordura y juicio.
¿De qué sirve el ingenio cuando no nos divierte? No hay nada más fatigoso que un ingenio triste.
Entre el ingenio y el talento existe la misma proporción que entre el todo y la parte.
El ingenio, sin el carácter, no vale nada.
El ingenio contra sí mismo, es humor.