No se puede ver en otro más de lo que es uno mismo, porque cada cual no puede comprender sino en la medida de su propia inteligencia.
Nadie puede comprender el dolor ni la alegría de los demás, solo marchamos los unos al lado de los otros.
Estamos de acuerdo con respecto a dos o tres puntos que podemos comprender, y discutimos a cerca de dos o tres mil puntos que no comprendemos.
sólo es posible actuar inteligentemente si se intenta comprender los pensamientos y sentimientos de nuestro oponente, como si viéramos el mundo con sus ojos.
Cuando era joven, creía que el amor tenía que ver con la comprensión; pero al envejecer descubrí que ningún ser humano comprende a otro.