Toma problemas prestados, si te lo dicta la naturaleza, pero no los prestes a tu vecino.
Desde muy joven llegué a la conclusión de que los problemas mundiales no se pueden resolver por medio de la fuerza.
La civilización no crea problemas nuevos, sólo intensifica los antiguos, los problemas eternos de la humanidad.
Cuando un problema filosófico ha sido resuelto, deja de ser filosófico y pasa al dominio de las ciencias.