En amor no son los que ceden los que aman más; sino los que resisten.
La buena carrera salva la vida todavía.
Si fueras tan juicioso que resistieras de buen grado los pequeños males de la vida, no te verías tantas veces obligado a soportar otros mayores.
La suma de todas las resistencias es la única que da siempre la medida de la pobreza y del hombre que la realiza.
Si resistimos a nuestras pasiones, es más por debilidad de ellas que por la fuerza nuestra.