Entrad en amoríos con las ideas cuanto queráis; pero sed cautos en casaros con ellas.
La constancia es la virtud por la que todas las demás dan su fruto.
Si los hombres se limitaran a hablar solamente de lo que entienden, apenas sí hablarían.
El que se fía de cualquiera demuestra poca discreción y sensatez; el que de nadie se fía demuestra tener todavía menos.
Escuchad el consejo del que mucho sabe; pero, sobre todo, escuchad el consejo de quien mucho os ama.
Los juicios que hacemos sobre los demás dicen lo que somos nosotros mismos.
Los peores enemigos son aquellos de los que el hombre no piensa defenderse.