El patriotismo que necesitamos no es el de los valientes sino de los que saben, para que guíen y enseñen y den al pueblo los senderos que ha trazado la vida moderna.
El patriotismo no debe ser un instinto que odia, sino una virtud que prefiere.
Donde mora la libertad, allí está mi patria.
El patriotismo es el huevo donde nacen las guerras.
Mi patria es el mundo; mis hermanos, todos los hombres.
En cualquier momento, un patriota es un loco.
Estas dos palabras, patria y ciudadano, deben ser borradas de las lenguas modernas.