Si quieres que tu secreto sea guardado, guárdalo tú mismo.
Nadie guarda mejor un secreto que el que lo ignora.
¿Cómo pretendemos que guarde otro un secreto, cuando nosotros mismos no lo hemos podido guardar?
El hombre guarda el mejor secreto ajeno que el suyo; la mujer, por el contrario, guarda mejor su secreto que el ajeno.
A quien dices tu secreto das tu libertad.
¿Qué es un hombre? Un montón de secretos.
Toda revelación de un secreto es culpa de quien lo ha contado.