Cumple con tu deber y serás digno; defiende tu derecho y serás fuerte, y sacrifícate si fuese necesario, que después la patria se alzará satisfecha sobre su pedestal inconmovible y dejará caer sobre tu tumba un puñado de rosas.
El patriotismo no debe ser un instinto que odia, sino una virtud que prefiere.
Donde mora la libertad, allí está mi patria.
El patriotismo es el huevo donde nacen las guerras.
Mi patria es el mundo; mis hermanos, todos los hombres.
En cualquier momento, un patriota es un loco.
Estas dos palabras, patria y ciudadano, deben ser borradas de las lenguas modernas.