Levanta el juramento del enemigo si cae en la presencia.
No aprietes con demasiado rigor la mano de un tierno niño.
Levanta del suelo la acémila de tu enemigo, si la encuentras caída en el camino.
El laborioso gana su vida; el perezoso la roba.
Debes pagar con tu trabajo el precio de tu vida.
No comprimas con mucha fuerza y vigor la mano de un tierno niño.
El trabajo aumenta la virtud. El que no sabe cultivar las artes debe trabajar con la azada.