Las puertas de la oficina de un verdadero líder están abiertas a todos aquellos que quieran entrar, y su lugar de trabajo está libre de toda formalidad u ostentación.
El líder exitoso debe entender y aplicar el principio del esfuerzo cooperativo y ser capaz de inducir a sus seguidores a hacer lo mismo. El liderazgo exige poder y el poder exige cooperación.