Con el tiempo aprendí que es un error sonreírle a quien nos ha engañado.
Hay pocos éxitos fáciles y pocos fracasos definitivos.
¿Buscar? No sólo buscar; crear.
A partir de una cierta edad, por amor propio o por sagacidad, las cosas que se desean en primer término con las que fingimos no apetecer.
Los días son quizá iguales para un reloj, pero no para un hombre.
La adolescencia es la única época en la que he aprendido algo.
Una hora no es simplemente una hora, es un vaso lleno de perfumes, de sonidos, de proyectos, de climas.