Triste es reconocerlo, pero en gestos absurdos y ridículos se funda la fama, más que en el trabajo, el sacrificio y el arte.
Todo amor es sacrificio; Dios es el límite del amor humano y del sacrificio.
El sacrificio es lo más hermoso que existe en el mundo.
El espíritu del cristianismo es un espíritu de sacrificio.
¿Quieres atraer al hombre? Imponle grandes sacrificios.