En el reino de los fines, todo tiene siempre un precio o una dignidad.
El mayor placer, sin mezcla alguna de fastidio, es el descanso cuando se está de veras cansado; y más si es de trabajar.
Si un hombre es objeto de mucha conversación, pronto será motivo de mucha crítica.
Obra siempre de modo que la razón de tus actos pueda servir de ley universal.
Podría decirse de un hombre llenamente que posee carácter. Con ello no solamente se dice mucho de él, sino que se le exalta; porque es una rareza que suscita respeto y admiración.