El amor me parece una de las pasiones más depuradas que tiene el ser humano.
Yo hablo del amor en el sentido más alto de la palabra. La redignificación del hombre, la desajenación del propio ser humano.
Todo acto de creación es un acto de amor.
Dios me preocupa como la existencia social, como sociología, pero no como un Dios por encima de los hombres o por encima de la Naturaleza.
Dios existe en el hombre, no existe fuera del hombre.
Todo lo que se produce dentro de la polis es política. Caminar es hacer política.